El municipio malagueño de Benadalid celebra esta semana su Feria y su tradicional Fiesta de Moros y Cristianos, declaradas de interés turístico provincial. Lo hará desde el miércoles 23 al domingo 27 de agosto, siendo el sábado el día de mayor interés.
Como cada año a finales de agosto, y como parte de las fiestas en honor a su patrón San Isidoro, se realiza esta representación teatral en verso ambientada en las contiendas que en tiempos pasados tuvieron lugar entre los moriscos y cristianos que poblaron estas tierras. Su origen se remonta al periodo transcurrido entre la conquista cristiana a finales del siglo XV y la expulsión definitiva de los moriscos de la Serranía a finales del XVI.
La puesta en escena se realiza en la explanada del castillo-cementerio de Benadalid, una antigua fortaleza árabe que tras la llegada de los cristianos perteneció a nobles familias castellanas como los Feria o los Medinaceli. El escenario es incomparable, el castillo con el verde del valle del Genal al fondo, el blanco y rojo del pueblo a un lado y los farallones calizos de la sierra a la espalda.
La representación, que se desarrolla en su totalidad en la tarde del sábado, se divide en dos actos. El primero conocido como ‘El Cautiverio’ termina con la victoria de los Moros que cautivan a San Isidoro y la derrota de los Cristianos que hacen prisioneros a los hijos del rey moro, los Infantes. En el segundo acto, ‘El rescate’, al engaño del rey moro, que no cumple con su parte del trato en el intercambio de rehenes, le sigue la batalla final que termina con la victoria cristiana y la conversión de los moriscos.
Todos los vecinos participan de una forma u otra en la obra, actuando en los principales papeles, conformando los ejércitos de ambos bandos, como extras o ayudando en la ambientación del pueblo para la ocasión. Después se celebrará una verbena en la plaza de Benadalid hasta la madrugada.
